Carretera eléctrica pública enciende debate entre expertos: ¿Favorece o no a HidroAysén?

Fuente: La Segunda

El anuncio que realizó el Presidente Piñera el pasado 21 de mayo sobre los cambios en el desarrollo energético que pedirá analizar al Comité Asesor, está dando que hablar.

A juicio de la ex ministra de Medio Ambiente de Bachelet y docente de la U. de Chile, Ana Lya Uriarte, “pareciera que se está dando un espaldarazo final al proyecto HidroAysén, al simplificarle la vida”.

La abogada explica que la iniciativa de la “carretera eléctrica pública” va de la mano con las “megalíneas, según anunció Piñera en su discurso. Si una iniciativa como ésta quisiera emparejar la cancha para los proyectos de Energías Renovables No Convencionales (ERNC), hay otros mecanismos”. Entre ellos, Uriarte define que se podría “dar más transparencia a las redes subtransmisoras que hoy funcionan en la opacidad. No hay información pública y transparente de su ubicación y algunas empresas transmisoras cobran por entregar estos datos a los pequeños proyectos. Si se mejora este punto, ya hay un avance suficiente para los proyectos que vienen”.

Consultada sobre las expansiones posteriores que se requieren para aumentar la capacidad del Sistema Interconectado Central (SIC) y que podrían beneficiarse con la carretera eléctrica, Uriarte explica que “cuando se tienen responsabilidades de gobierno hay que hacer las tareas dentro de los contextos, una megalínea es un espaldarazo a HidroAysén”.

A su juicio el proceso de evaluación ambiental “está viciado” tras los pronunciamientos del ministro Hinzpeter y del propio Presidente a favor de las centrales. “Las declaraciones de Piñera son extraordinariamente graves para la institucionalidad ambiental, que tiene lógica cuando quienes están a cargo generan garantías de imparcialidad. Si es el propio Presidente el que manifiesta su favor respecto del proyecto, el sistema se hace trizas y pierde credibilidad”.

Cree que por la oposición que enfrenta el proyecto, “por el bien de Chile la empresa debería renunciar a instalar su proyecto en el país”.

Rudnick: TDLC insistió que línea de transmisión se hiciera en conjunto con otros

El académico de la UC e integrante del Comité Asesor Presidencial en materia energética, Hugh Rudnick, en cambio, tiene una visión positiva. Explica que actualmente el SIC “es una carretera pública eléctrica, y en 2004 cuando se cambió la ley se definió que cada cuatro años expandirla, lo cual ha sido bastante tímido y ha producido cuellos de botella”.

A su juicio, hacer mejoras al sistema “permitirá acomodar la generación de las minihidro de la región de Los Lagos y las eólicas del norte chico”.
Respecto a HidroAysén, Rudnick sostiene que “Endesa y Colbún cuando fueron al TDLC para consultar el proyecto, el tribunal insistió que la línea de transmisión se hiciera en conjunto con otros proyectos, preguntándole a otros generadores si querían unirse. Pero eso pasa por llegar a acuerdos entre privados, y entiendo que HidroAysén y Xstrata están negociando, pero pueden no llegar a buen término”.

En ese sentido, explica que hacer una sola carretera desde Aysén a Santiago “además del interés de estos privados, puede buscar el menor impacto ambiental posible, además de reducir los plazos de tramitación, construcción y costos”.

Rudnick agrega que es necesario planificar bien la expansión del sistema, ya que hoy la energía que generaría Hidroaysén o Xstrata en la XI Región “no cabe simplemente en las líneas actuales”, y otros proyectos también enfrentarán restricciones en el futuro. Para ello es necesario buscar tecnologías que sean económicas y eviten pérdidas de energía para el trasporte hacia Santiago, la zona de mayor consumo del SIC.

Jiménez: “También beneficia a centrales chicas”

La experta de Libertad y Desarrollo, Susana Jiménez, cree que detrás de la propuesta de Piñera “está construir una franja de servidumbre donde se puedan desarrollar líneas eléctricas necesarias, en la medida que va aumentando la oferta y demanda requiere más transmisión”.

Explica que obtener hoy permisos para hacer una línea y negociar con cada propietario “se está volviendo algo muy engorroso y lento, casi tan lento como la tramitación de las centrales mismas, eso también afecta la competencia de los mercados”.

“No veo que esto beneficie sólo a Hidroaysén, también a centrales chicas que hoy enfrentan problemas de judicialización con propietarios”, sostiene, agregando que aunque se realizara el proyecto de Endesa y Colbún, éste no alcanza a satisfacer toda la demanda energética a futuro, “por lo que es bueno que se facilite la conexión a la línea de distintos proyectos”.

Jiménez explica que no ve cambios al nivel de que “el Estado decida qué tipo de centrales se instala y dónde con este cambio a la transmisión. Hay países que cuotean cierta cantidad de energía, como en Brasil, pero si se hace eso, se estaría subsidiando ERNC que quizá hoy no son tan competitivas”.

Rudnick agrega que un modelo de planificación estatal sobre centrales “puede no gustarle a los ambientalistas también, porque Brasil no sólo licita ERNC, también está pensando desarrollar megarepresas en la Amazonía y Perú también planea hacer hidroeléctricas en sus ríos para abastecer a Brasil”.

Fuente: La Segunda